A break can be what we are aiming for

A break can be what we are aiming for. Foto: Pep Herrero

A break can be what we are aiming for

Mycket, Dream Castles, 2016. Foto: Pep Herrero

A break can be what we are aiming for

Marit Östberg, Sisterhood, 2011. Foto: Pep Herrero

A break can be what we are aiming for

Girls like us, Girls like us, 2018. Foto: Pep Herrero

A break can be what we are aiming for

Girls like us, Girls like us, 2018. Foto: Pep Herrero

A break can be what we are aiming for

Susanne M. Winterling, We need to learn your systems, 2017. Foto: Pep Herrero

A break can be what we are aiming for

Susanne M. Winterling, Plancton planetary, 2017. Foto: Pep Herrero

A break can be what we are aiming for

Susanne M. Winterling, Plancton planetary, 2017. Foto: Pep Herrero

A break can be what we are aiming for

Merrit K., Take care, 2014. Foto: Pep Herrero

A break can be what we are aiming for

Adriana Minolitti, Puppy, 2017. Foto: Pep Herrero

A break can be what we are aiming for

Laia Estruch, Moat, 2016. Foto: Pep Herrero

A break can be what we are aiming for

Alok Vaid Menon, Bible belt, 2014. Foto: Pep Herrero

Comisaria: Irina Mutt

A break can be what we are aiming for

Del 26 de abril al 1 de julio de 2018. Proyecto de comisariado, Sala Gran. Barcelona Producció 2017

Artistas: Mycket, Susanne M. WInterling, Girls Like Us, Merrit K., Alok Vaid-Menon, Marit Östberg, Laia Estruch y Adriana Minoliti

“A break can be what we are aiming for” es una cita directa de la autora Sara Ahmed que nos remite a la noción de ruptura, de quebradura, pero también de pausa, de interrupción. El elemento frágil puede ser una estructura, un contexto o una situación que nos va desgastando, rompiendo, haciendo daño. El hecho de sentirnos vulnerables hace que necesitemos espacios seguros y de encuentro para recuperar fuerzas y hacer familia, grupo, tribu, guerrilla. Cuidarse uno mismo y cuidar a los demás también es un acto político. ¿Existe alguna forma de relacionarnos con la ruptura que no pretenda la restauración de lo que se ha roto? Quedarse fuera puede constituir el espacio seguro. Una ruptura podría ser lo que queremos, ser a la vez grieta y martillo.

Las obras y los formatos de esta exposición circulan y atraviesan estas ideas que se centran en la vulnerabilidad como potencia, la energía de ser derrocado y derrocar al mismo tiempo, buscando, en un doble sentido, la idea de espacio seguro y también la posibilidad de expandirse, de circular de forma fragmentaria y colectiva.

Irina Mutt (Girona, 1982) Es licenciada en historia del arte por la Universidad de Barcelona (2012). Anteriormente había cursado el grado superior en la Escuela Superior de Diseño y Arte Llotja y un curso de cómic en la Escola Joso. Ha completado su formación mediante talleres (con A*Desk, ACVIC, ACCA, etc.) y derivas por los espacios expositivos, conversaciones con artistas y amigas, con los feminismos y también con los golpes y las caídas de la vida.

Desde 2013, colabora con A*Desk escribiendo críticas. También en 2013, con el colectivo Supterranis, empezó a coordinar y comisariar el Festival Plaga: propuestas artísticas en espacios autoinstituídos. En 2014 obtuvo la beca de Sala d’Art Jove en la modalidad de mediación y tutorías. También en 2014 comisarió El temps invertit en Can Felipa, resultado de la convocatoria anual de Can Felipa Arts Visuals.

En 2015 hizo una residencia en la Nau Estruch de Sabadell con el proyecto MICROS. Por otro lado, desde 2015 colabora en proyectos expositivos y talleres en residencias como Can Serrat, escuelas como Metàfora International Workshop o la exposición anual de residentes en La Escocesa. En 2016 comisarió Deshaciendo texto, uno de los tres proyectos ganadores de la convocatoria Inéditos, presentado en La Casa Encendida.

Desde enero de 2017, forma parte de la comisión de programas del Centro de Producción e Investigación de Artes Visuales Hangar.

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